Mucho se ha hablado acerca de la disminución de la carga laboral, y muchas personas están a favor, pero al mismo tiempo hay a quienes no les parece. Por otro lado, hay quienes, mediante el pensamiento crítico, analizan la situación y determinan qué es lo que podría ser mejor para el mercado actual. Entonces, reducir la jornada laboral, ¿Está bien o mal?
Como todo en la vida, este tópico necesita ser analizado con calma. Se trata de trabajo y dinero, así que se debe hacer un análisis previo para evitar todo tipo de errores. En este artículo vamos a analizar los pros y contras de reducir la jornada laboral, así que aprenderás qué es lo bueno y lo malo de usar esta propuesta dentro de tu empresa.
Pros de reducir la jornada laboral
Reducir la jornada laboral es igual a trabajar menos tiempo, pero en algunos casos esto no necesariamente se traduce en realizar menos trabajo. La mayoría de veces en las que se ha implementado este cambio en una empresa, se han encontrado con empleados motivados, con estrés reducido y libres de distracción.
Sí, estás trabajando menos horas, pero esto te obliga a distraerte menos y a ser más productivo en tus horas laborales. Esto significa una planificación de tareas optimizada, un descanso físico y mental mayor y, sobre todo, una gran capacidad de volver al siguiente día sin sentirse agobiado.
Los aumentos en seguridad laboral también son destacables. Reducir la jornada laboral puede terminar reduciendo el burnout en el trabajo, así como mejorando la concentración de los trabajadores, que tendrán ahora un enfoque productivo y a favor de cumplir e intervenir en los proyectos empresariales.
Contras de reducir la jornada laboral
En algunos tipos de empresa específicos, reducir la jornada laboral puede resultar contraproducente. Por ejemplo, en las manufactureras, podría suceder que no se llegue al objetivo de producción semanal, reduciendo así las ventas. Por otro lado, esto puede contribuir al reemplazo de la mano de obra humana con procesos totalmente automatizados.
En este sentido, esto puede desembocar en reducciones de salario. Aunque esto sería una situación negativa ocasionada por los mismos empleadores. Las personas trabajarían menos horas, realizarían la misma carga de trabajo, pero aun así, sus sueldos estarían afectados negativamente.
¿Es bueno o malo reducir la cantidad de horas trabajadas?
En resumen, depende del tipo de empresa y a lo que se dedique. Si tienes una empresa manufacturera y tus objetivos de producción se cumplen a duras penas, entonces esta podría no ser la mejor decisión que puedas tomar. Si, en cambio, tienes trabajadores en oficina, o tienes un despacho de abogados y quieres aumentar la productividad, puedes intentar esta estrategia durante un tiempo y ver qué resultados obtienes.
Reducir la jornada laboral es algo que puede resultar positivo, así como negativo. Sin embargo, la desmotivación y el estancamiento son consecuencias de hacer siempre las mismas cosas, durante todos los días. Al final, estarías pagando el mismo precio por no intentar nuevos modelos de gestión interna en tu empresa.
Cómo reducir las horas de trabajo y aumentar la productividad
Reducir la jornada laboral en tu empresa puede ser el primer paso para aumentar la productividad. Sin embargo, por sí sola, esta acción no es suficiente. Lo que necesitas en este caso es una buena estrategia de transición en tu empresa. A continuación, te podemos mostrar algunos consejos.
Establece objetivos semanales para cada departamento
Los empleados necesitan tener objetivos claros, medibles y alcanzables. Crea un programa de seguimiento para que puedan completarlo y se sientan motivados al cumplir los objetivos semanales que hayas establecido.
Forma a tus trabajadores
Al mismo tiempo, es necesario un proceso de formación anterior en materia de productividad. La reducción de la carga laboral puede significar menos trabajo, pero debes hacerles saber que es una medida para mejorar el desempeño de todos. Por supuesto, para no acabar con la motivación, no reduzcas los sueldos.
Recuerda que la seguridad laboral es lo primero
Preven-ir es un servicio de prevención ajeno. Te podemos asesorar en materia de prevención de riesgos laborales, reduciendo la carga física y mental. Por otro lado, diseñamos puestos de trabajo seguros y te asesoramos en conseguir condiciones ambientales ergonómicas. Tus trabajadores estarán motivados, seguros y con una jornada laboral menos estresante.
Apostamos por espacios de trabajo seguros y organizados, y te ayudamos a mejorar la seguridad de tu empresa. Las personas son nuestra prioridad, y la prevención de riesgos laborales en cada rincón del país es nuestra misión.