¿Sufres acoso laboral o mobbing? El entorno laboral debería ser un lugar donde podamos desempeñar nuestras labores y crecer profesionalmente. No obstante, en ocasiones, podemos ser víctimas de actitudes intimidatorias por parte de superiores u otros empleados. Si es tu caso, o quieres conocer cómo identificar estas actitudes, continúa leyendo. Te explicaremos lo que necesitas conocer sobre ello.
Los efectos del mobbing o acoso laboral, además de ser contraproducentes para quien los sufre, pueden ser confundidos con burn out u otras alteraciones psicológicas presentes en profesionales. También debemos diferenciarlo del bullying, el cual se distingue por incluir violencia física. El hostigamiento puede darse de diferentes formas. Entonces, ¿Cómo reconocerlo?
¿Qué es el mobbing o acoso laboral?
Nos referimos con la palabra mobbing, al acoso que sucede en el ambiente laboral. Lo que caracteriza y diferencia esta práctica es que las actitudes y estrategias de acoso no suelen ser frontales o basadas en la violencia física. En cambio, se trata de acciones constantes en las que se utiliza violencia psicológica para abusar de la persona. Esto debido a que el acosador no quiere dejar rastro de su comportamiento.
Precisamente, este término viene de la etología. Éste se utiliza para darle nombre a un comportamiento, caracterizado por el atosigamiento, que tiene cierta especie de pájaros. Se realiza con la finalidad de asustar y alejar a otro de una especie más grande, el cual consideran una amenaza. Esta conducta animal presenta cierto paralelismo con las actitudes que adopta quien ejerce acoso laboral.
Este tipo de acoso no tiene una causa que se encuentre directamente relacionada con el desempeño del individuo. Suele deberse a varias razones, entre ellas la organización de la empresa, el exceso de tareas asignadas a los trabajadores. Otros motivos son el estado de frustración que pueden presentar algunos individuos, quienes lo canalizan a través del hostigamiento a sus compañeros.
Comportamiento de un mobbing
Las actitudes que presenta un mobbing, suelen caracterizarse por acciones sutiles de violencia psicológica. Algunas de las más comunes son: insultar o gritar a la persona cuando se encuentran solos o en presencia de subalternos. También recurre a la asignación de tareas con un límite de tiempo que son imposibles de cumplir. De igual forma, intenta saturar a la víctima de forma premeditada, con trabajo excesivo.
Otros de los comportamientos que caracterizan al hostigador son: un trato discriminatorio, reasignación de tareas sin notificar al trabajador, difamación, aislamiento, bloqueo del desarrollo profesional. También suelen ignorar o atribuir sus logros a otras. Asimismo, suelen ridiculizar la labor y las ideas de la víctima. Todas estas técnicas tienen como fin infligir daño en la persona.
Tipos de mobbing
Si bien, existen comportamientos que definen este tipo de hostigamiento laboral, éste puede categorizarse de acuerdo al puesto que ejerza el acosador en la empresa, o también, estar basado en la finalidad que éste tenga al ejercelo. En esta ocasión te explicaremos los tipos de mobbing que existen según el objetivo que posea la persona. Estos se clasifican en:
a) Mobbing estratégico
Suele realizarse con la intención de que la víctima renuncie de forma voluntaria. Éste se caracteriza por ser parte de las estrategias utilizadas dentro de la corporación. La finalidad es que la empresa no tenga que pagar la indemnización exigida cuando ocurre un despido injustificado. De esta forma, la actitud hostigadora busca que el individuo se marche “por decisión propia” del lugar.
b) Mobbing de gestión
Es ejecutado por los directivos o jefes de una corporación. La finalidad es la de poder asignar cada vez más responsabilidades y actividades al trabajador sin que éste considere que puede negarse, llegando a casos similares al esclavismo en el trabajo. También se realiza con el objetivo de deshacerse de un individuo que consideran altanero o que no se ajuste al perfil de la empresa.
c) Mobbing disciplinario
Se refiere al tipo de mobbing en el cual el objetivo es el de hacer que la persona acosada se adapte a las exigencias o “molde” establecido. De no ser así, será castigada con comportamientos abusivos. También funciona para hacerle entender a los demás empleados que serán castigados si ejercen acciones similares a la de la víctima. De esta forma, los subordinados no se atreven a llevar la contraria al acosador.
d) Mobbing perverso
A diferencia de las otras clasificaciones, este tipo de mobbing no tiene una finalidad dentro de la empresa. De hecho, es ejercido por individuos con personalidades manipulativas y solo son realizadas por placer. En este estilo de acoso, el hostigador realiza acciones de forma sutil y sin testigos. En estos casos, la única forma de frenarlo es reeducando al acosador o cesar de sus servicios en la organización.
La salud mental es primordial para que todo trabajador pueda desempeñar sus funciones correctamente. Es importante frenar comportamientos de acoso laboral, que alteren el desenvolvimiento del individuo. Si quieres conocer más sobre la prevención de enfermedades y accidentes, consulta con el equipo de PREVEN-IR, ellos te asesorarán si eres víctima de acoso laboral.