Los acontecimientos importantes de nuestra vida dejan una impronta emocional que puede permanecer a lo largo del tiempo. En ocasiones esto puede tener consecuencias negativas que establece limitaciones en nuestro quehacer diario y nos impide el desarrollo normal de nuestras actividades. Esto es lo que se conoce como trauma y es una dolencia de salud mental que puede ser tratada.
La situación vivida por la COVID19 ha supuesto un verdadero trastorno a gran nivel de la vida de muchas personas. Su impacto ha afectado a muchos ámbitos y en el emocional también se pueden observar traumas relacionado con situaciones de miedo, tristeza, ansiedad y otros estados que pueden perdurar demasiado en el tiempo y que deben ser tratados siguiendo una serie de pautas.
Para saber si se está padeciendo un trauma causado por la situación de crisis de la COVID19 podemos analizar si sufrimos alguno de los síntomas que son indicativos de esta dolencia de salud mental. Suele estar relacionado con el insomnio o la dificultad del sueño debido a pesadillas. También puede aparecer nerviosismo, irritabilidad, ansiedad, miedo, dificultad para concentrarse y sentimiento de culpa o vergüenza.
Para superar este trauma lo que se necesita tras analizar el impacto emocional sufrido es establecer nuevas herramientas que permitan manejar la situación de excesiva carga emocional. Para ello se deben seguir unas pautas que intentan trabajar diversos ámbitos como la percepción que el sujeto tiene de sí mismo y de la situación que está viviendo.
La crisis por la COVID19 puede causarnos un fuerte y duradero impacto emocional
Una de las primeras acciones que se tiene que realizar la persona que sufre el trauma por la COVID19 es conocer y volver a establecer la relación de confianza que se tiene con las propias competencias y capacidades. Las pautas vienen a establecer con qué recursos se cuentan para poder hacer frente a la situación de crisis.
En este sentido sería recomendable conocer las medidas para evitar contagios y las recomendaciones de los organismos oficiales. Ofrecer a la persona con trauma herramientas para formar parte activa en el control de la crisis por el COVID19 puede ser una manera de controlar las emociones que nos pueden incapacitar.
Muchas de las pautas de los tratamientos de un trauma pasan por trabajar la actitud de resiliencia que trata de adaptar las situaciones negativas con acciones positivas que sean alcanzables para el sujeto. La capacidad de sobreponerse a los momentos críticos se consigue sopesando los diversos aspectos que pueden suceder de la manera objetiva. Esto también se puede aplicar en la situación que vivimos por la COVID19.
Aumentar la confianza en uno mismo y saber las acciones concretas que pueden ayudarnos a la adaptación de la nueva situación por la COVID19 son las pautas que ayudarán la superación del trauma. Esto que puede parecer bastante sencillo en realidad requiere de bastante trabajo y de la intervención de un profesional experto en piscología.
El psicólogo es el que ayudará al sujeto a afrontar las emociones causadas por el trauma y marcará las pautas a seguir según la evolución obtenida. Esto es de especial importancia sobre todo para aquellas personas que han pasado por momentos más intensos durante la crisis del COVID19 como los profesionales sanitarios o los propios pacientes que han pasado por esta enfermedad.
En Preven Ir podrás encontrar el mejor asesoramiento psicológico para hacer frente a los posibles traumas causados por la COVID19. Con la colaboración de Eunoia Psicología hemos elaborado una “Guía para el manejo del impacto emocional derivado del COVID-19”. También podrás conseguir atención psicológica de manos de un equipo de profesionales.