¿Qué medidas psicológicas podemos adoptar en el entorno laboral?
El Colegio Oficial de Psicólogos de Cataluña (COPC) ha resumido de manera concisa pautas que deberíamos adoptar en nuestro entorno laboral para cuidar nuestra salud emocional.
“No olvidemos que una buena salud emocional, favorece el rendimiento y la concentración.”
Valida y acepta tus emociones
Las emociones siempre tienen un mensaje detrás. Aparecen para informarnos. De modo que cuando aparezcan, prestemos atención al mensaje que las acompañan. Escuchémoslas en vez de reprimirlas.
Céntrate en la solución, no en el problema
A menudo dedicamos más tiempo a pensar en el problema, a lamentarnos de la existencia de un problema o de porque me ha tocado a mí, en vez de buscar soluciones. Nuestra actitud ante los problemas es fundamental.
Limita el tiempo para quejarte
Nuestro lenguaje, nuestra forma de comunicarnos determina mucho el estado de ánimo en que nos encontremos. Si a menudo nos estamos lamentando o quejando de la situación, lo más probable es que tengamos un ánimo decaído e irritable. Es imposible no quejarse. A menudo pasan cosas que nos molestan o que nos dificultan el camino, pero intentemos limitar las veces que nos quejamos. No hace falta quejarse de todo. Escojamos que es realmente importante.
Integra las rutinas de seguridad
Cumple con las medidas de seguridad. Con el tiempo formarán parte de nuestra rutina y las realizaremos automáticamente.
Piensa de forma objetiva
Tener metas y objetivos nos ayuda a movilizarnos. Nos motiva, pero estas tienen que ser acordes a nuestras capacidades, a nuestras posibilidades. Ajustemos nuestras expectativas a la realidad. Seguramente ahora es difícil poder rendir como antes. Aún nos estamos adaptando a la situación. Por tanto, no intentemos rendir ni llegar a todo lo que hacíamos antes, o que esté tan perfecto como antes.
Mantén una actitud proactiva y de cambio
Desarrolla un papel activo, predispuesto a adaptarte y a aportar ideas.
Identifica como te hablas a ti mismo
Como hemos dicho anteriormente, nuestro lenguaje, la forma en que nos hablamos a nosotros mismos, determina como nos sentimos. Paremos un momento e identifiquemos como nos hablamos. ¿Permitiríamos que otra persona nos hablara cómo nosotros nos hablamos a nosotros mismos? ¿Si no lo permitimos de otra persona, porque si a nosotros mismos?
Cuida el lenguaje no verbal
El 80% de la comunicación viene del lenguaje no verbal. Nuestros gestos, nuestra mirada, nuestra expresión facial comunican mucho más que nuestras palabras. A veces no se trata tanto de qué decimos, sino de cómo lo decimos.
Ayuda a las personas que tienes enfrente
No todos vivimos una situación del mismo modo. Cada uno valora e interpreta una situación según la perciba, analice y viva. No hay interpretaciones correctas y erróneas. No debemos juzgar cómo el otro afronte o le afecte una situación. Debemos mostrar empatía por cómo interpreta y siente el otro una situación. Interesarnos por cómo está y en qué le podemos ayudar.
Ten presente la Psicohigiene
No olvidemos cuidarnos. Por eso:
- Respeta tu tiempo de descanso. Si no descansamos, tanto nuestra funcionalidad como nuestro ánimo decaen.
- Relativiza los conflictos. No es adaptativo ni funcional discutir por todo. Escoge que batallas luchar.
- Importante trabajar en equipo. Somos seres sociales y necesitamos el contacto con el otro. Trabajemos conjuntamente y ayudémonos mutuamente.
- Céntrate en el aquí y ahora. Focalízate en el presente.
- Hacer respiraciones profundas para relajarnos.
- Cuida la relación con los demás.
- Utiliza el sentido del humor. Es una gran herramienta para afrontar las situaciones y para cuidarnos.
Si lo necesitas, no dudes en ponerte en contacto con profesionales de la psicología.
