El riesgo de contagio del COVID-19 o Coronavirus, es una variable que no se debe descartar en la nueva normalidad, por esta razón es imprescindible aplicar estrategias efectivas para reducir la exposición al virus. Será necesario diseñar los espacios, optar por nuevos mecanismos que garanticen el distanciamiento social, medidas sanitarias obligatorias y un sinfín de recursos para resguardar la salud de todo el equipo de trabajo.
Retomar la rutina de la oficina, después del impacto mundial del COVID-19, es el reto que enfrentan los diferentes sectores comerciales en todos los niveles, con la intención de recuperar el tiempo invertido en la cuarentena impuesta a consecuencia del Coronavirus. Para que las oficinas puedan plantear un regreso sin riesgos de contagio, será vital cumplir con las normas divulgadas por los diferentes organismos sanitarios, así como valerse de la información que día a día surge con respecto a este virus.
Existen claves necesarias para que las oficinas puedan retomar su dinámica de trabajo tras el paso del Coronavirus, como lo ha planteado el Ministerio de Ciencia e Innovación, que especifica tres premisas insustituibles para regresar al trabajo, la primera de ellas es el conocimiento y cumplimiento de las normas específicas para cada sector, ya que no todos los modelos de negocio deben regirse por las mismas normas, debido a su porcentaje de riesgo. Se recomienda la asesoría de expertos en Prevención de Riesgos Laborales, patronales y asociaciones.
La siguiente premisa es evitar hablar de espacios o de oficinas libres de coronavirus con fines publicitarios, ya que el riesgo de transmisión es una variable que aún no desaparece. Finalmente es recomendable contemplar que la novedad del COVID-19 continúa, ya que día a día siguen apareciendo registros y datos desconocidos que pueden ser útiles a la población, por lo que no se debe descartar la implementación de medidas que aún no han sido contempladas.
Cuidar al equipo de trabajo ante el riesgo de coronavirus
No cabe duda que la necesidad de reactivar los diferentes sectores económicos es una necesidad para todos, pero más allá de eso, será necesario garantizar la salud del equipo de trabajo en las oficinas, ya que si el equipo se encuentra en buenas condiciones, las empresas y organizaciones tendrán los resultados esperados, de lo contrario, se compromete la operatividad y continuidad de la empresa en medio de los riesgos del coronavirus o de algún rebrote del mismo.
Para tener éxito es las diferentes estrategias preventivas en las oficinas, con respecto al coronavirus, no solo se trata de cumplir con normativas, sino que será necesario contar con cierto equipo e implementos que permitan la ejecución de estas nuevas reglas, entre los que destacan las insustituibles mascarillas, la solución hidroalcohólica y otros equipos de protección individual, que sirvan para orientar a los usuarios de cara a esta nueva normalidad.
Espacios claves en las oficinas y su distribución
Sin duda el espacio en las oficinas será un factor clave, ya que anteriormente la armonía de un lugar de trabajo se basaba en compartir sin importar las distancias, ahora será necesario optar por recursos como mamparas o separadores físicos que sirvan para dividir y proteger. Para que estas medidas sean exitosas, será esencial aplicar estrategias de comunicación que permitan ejecutar esta normativa sin producir una sensación de bloqueo en la información, sino que, por el contrario, las personas se sientan conectadas a todo momento.
La filosofía de flexibilidad ante el cambio deberá ser aplicada en las oficinas para crear ambientes adaptables con la menor inversión de recursos posibles. La nueva normalidad también permitirá analizar las conductas y hábitos de los empleados y clientes, para detectar diferentes patrones y escenarios de riesgo, y así, poder atacar los puntos débiles de estas estrategias. Desde los controles de entradas, la monitorización sanitaria de la plantilla y el análisis de estos datos, todos serán recursos muy valiosos para que las empresas no se expongan.